Hablamos muy poco sobre la sequedad vaginal, y cuando lo hacemos, suele decirse que es algo normal con el paso de los años, especialmente durante la perimenopausia y la menopausia. Pero, la realidad es más amplia. La sequedad vaginal puede aparecer a cualquier edad y causar desde pequeñas molestias hasta dolor en momentos íntimos. Con la idea de romper los tabúes sobre nuestro cuerpo, nos unimos a The Yes Yes Company para explorar este tema desde qué es hasta cómo podemos mejorar la situación.
¿Qué es la sequedad vaginal?
La sequedad vaginal sucede cuando hay menos lubricación natural en la vagina de lo normal. Esto ocurre porque la vagina, que normalmente se mantiene húmeda gracias a los fluidos del cuello uterino y las secreciones de las glándulas de Bartolino que se encuentran cerca de la entrada de la vagina, no produce suficiente humedad. Los síntomas de la sequedad vaginal pueden variar bastante, incluyendo sensaciones de ardor, picazón, molestias, secreción inusual o dolor durante las relaciones sexuales o la masturbación. Es una condición con múltiples causas, pero también hay diversas maneras de abordarla y mejorar el bienestar.
La sequedad vaginal resulta ser más común de lo que muchas personas creen. De acuerdo con Women’s Health Concern, cerca del 17 % de quienes tienen entre 18 y 50 años experimentan sequedad vaginal durante las relaciones sexuales, incluso antes de llegar a la menopausia. Lo bueno es que, al entender las causas subyacentes, es posible tratar los síntomas y encontrar alivio.
La cantidad de lubricación vaginal está directamente relacionada con los niveles de estrógeno, una hormona que puede variar a lo largo de las distintas etapas vitales, como durante el embarazo, la menopausia o los ciclos menstruales.
¿Qué causa la sequedad vaginal durante el periodo?
Durante el periodo, es común que la lubricación natural disminuya debido a las fluctuaciones en los niveles de estrógeno, que suelen ser más bajos en esta fase del ciclo menstrual. El estrógeno juega un papel crucial en la producción de lubricación vaginal, manteniendo la vagina húmeda y preservando el grosor de su recubrimiento interior. La reducción de esta hormona puede llevar a una menor lubricación y, como consecuencia, aumentar la susceptibilidad a experimentar sequedad vaginal.
Cómo puedes reducir los síntomas de la sequedad vaginal durante el periodo
Para aliviar las molestias causadas por la sequedad vaginal durante tu periodo, hay varias estrategias que puedes considerar, ya sea para mejorar tu bienestar diario o para hacer más cómodas las relaciones sexuales. Aquí te dejamos algunas ideas:
Usa hidratantes vaginales
Si experimentas incomodidad con frecuencia debido a bajos niveles de estrógeno, lo ideal es consultar a tu médico para explorar las mejores opciones para ti. Una alternativa puede ser el uso de lubricantes vaginales, como el YES® VM, que se fabrica con ingredientes orgánicos y éticos. Este lubricante está diseñado para hidratar los tejidos vaginales sin modificar el pH. Para optimizar los resultados, se sugiere aplicarlo cada tres días, preferiblemente antes de dormir mientras estás acostada en la cama.
Experimenta con lubricantes
Si notas falta de lubricación natural aun cuando te sientes excitada, usar un lubricante puede ser de gran ayuda tanto para los juegos previos, la masturbación, como para el sexo. YES WB es una excelente opción; es un gel acuoso orgánico, certificado por la Soil Association, que alivia la sequedad y mejora la sensación con un efecto sedoso. Además, incluso sin sequedad vaginal, el lubricante puede enriquecer la experiencia sexual. Un estudio realizado en 2013 reveló que más del 90 % de las mujeres coincidieron en que el uso de lubricante hacía que el sexo fuera más cómodo, placentero o simplemente mejor. Este hallazgo destaca cómo el uso de lubricantes puede mejorar significativamente la experiencia sexual.
Si usas tampones con aplicador durante la menstruación, considera usar un hidratante vaginal o lubricante si encuentras dificultades, o bien opta por compresas de materiales naturales, diseñadas para ser suaves y delicadas con la piel.
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Elige un anticonceptivo diferente
Si después de cambiar tu anticonceptivo hormonal has notado un incremento en la sequedad vaginal, es una buena idea hablarlo con tu médico. Puede ser necesario evaluar otras opciones de anticonceptivos que se ajusten mejor a tu cuerpo y alivien este efecto secundario.
Monitorea tu periodo
Monitorear tu periodo con una aplicación es una excelente estrategia para estar al tanto de las fases de tu ciclo, lo que te permite prepararte mejor para esos días en los que es más probable experimentar sequedad vaginal y así mantener tu comodidad.
La sequedad vaginal es un problema común y no hay motivo para sentir vergüenza; además, existen soluciones para tratar los síntomas y evitar que impacten tu bienestar físico, mental y sexual. Si algo te preocupa o notas cambios en tu cuerpo, es crucial buscar asesoramiento médico.
Recuerda, cada cuerpo es único, por lo que familiarizarte con el tuyo, mediante el monitoreo de tu ciclo o incluso examinando tu vulva ocasionalmente, te ayudará a entender lo que es normal para ti.
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